domingo, 23 de enero de 2011

El mago alérgico

Había una vez un mago simpático y alegre al que encantaba hacer felices a todos con su magia. Era también un mago un poco especial, porque tenía alergia a un montón de alimentos, y tenía que tener muchísimo cuidado con lo que se llevaba a la boca. Constantemente le invitaban a fiestas y celebraciones, y él aceptaba encantado, porque siempre tenía nuevos trucos y juegos que probar.
Al principio, todos eran considerados con las alergias del mago, y ponían especial cuidado en preparar cosas que pudieran comer todos. Pero según fue pasando el tiempo se fueron cansando de tener que preparar siempre comidas especiales, y empezaron a no tener en cuenta al buen mago a la hora de preparar las comidas y las tartas. Entonces, después de haber disfrutado de su magia, le dejaban apartado sin poder seguir la fiesta. A veces ni siquiera le avisaban de lo que tenía la comida, y en más de una ocasión se le puso la lengua negra, la cara roja como un diablo y el cuerpo lleno de picores.
Enfadado con tan poca consideración como mostraban, torció las puntas de su varita y lanzó un hechizo enfurruñado que castigó a cada uno con una alergia especial. Unos comenzaron a ser alérgicos a los pájaros o las ranas, otros a la fruta o los asados, otros al agua de lluvia.. y así, cada uno tenía que tener mil cuidados con todo lo que hacía. Y cuando varias personas se reunían a comer o celebrar alguna fiesta, siempre acababan visitando al médico para curar las alergias de alguno de ellos.
Era tan fastidioso acabar todas las fiestas de aquella manera, que poco a poco todos fueron poniendo cuidado en aprender qué era lo que producía alergia a cada uno, y preparaban todo cuidadosamente para que quienes se reunieran en cada ocasión pudieran pasar un buen rato a salvo. Las visitas al médico fueron bajando, y en menos de un año, la vida en aquel pueblo volvió a la total normalidad, llena de fiestas y celebraciones, simpre animadas por el divertido mago, que ahora sí podía seguirlas de principio a fin. Nadie hubiera dicho que en aquel pueblo todos y cada uno eran fuertemente alérgicos a algo.
Algún tiempo después, el mago enderezó las puntas de su varita y deshizo el hechizo, pero nadie llegó a darse cuenta. Habían aprendido a ser tan considerados que sus vidas eran perfectamente normales, y podían disfrutar de la compañia de todos con sólo adaptarse un poco y poner algo de cuidado.

miércoles, 19 de enero de 2011

Como Tomar Decisiones

Leyendo un artículo en la revista Psicologies me encontré con el dossier de este mes y me pareció interesante para poder compartirlo.
Nos propone este dossier como aprender a tomar decisiones en cinco etapas partiendo de la reflexión: ¿porque nos cuesta tanto elegir? La vida no deja de ser una sucesión de elecciones. Aunque a veces, ahogados por la marea de posibilidades y desconectados de nosotros mismos acabemos por no saber lo que nos conviene.

  • ETAPA 1: Busca la calma interior. Perdidos entre las demandas del exterior y nuestros conflictos interiores, a menudo nos cuesta saber lo que queremos. Aprender a encontrar la clama es el primer paso para poder hacer buenas elecciones.
  • ETAPA 2: Identifica tus Deseos. Reconocer nuestras aspiraciones es clave en la toma de decisiones. Conectar con nuestras emociones y visualizarnos llevando a cabo nuestras metas nos ayudará a reconocer nuestros verdaderos deseos y a elegir de acuerdo con nuestros mismos.
  • ETAPA 3: Para Elegir Afina tu Intuición. Seguir nuestro instinto es guiarnos por una inteligencia irracional ligada a nuestro mundo interior que nos permite analizar las situaciones de forma rápida. Aunque no es infalible, escucharlo nos ayuda a elegir.
  • ETAPA 4: Ser Flexible es Ser Valiente. No es habitual que una decisión implique sólo a uno mismo. Por ello, es importante que nuestras decisiones contemplen también las opiniones y decisiones de los demás. 
  • ETAPA 5: Pasa a la Acción. Una vez hemos tomado una decisión queda lo más difícil llevarla a la práctica. Recordar cuáles son los motivos que nos llevaron a tomarla y no dejarnos dominar por el miedo a equivocarnos nos ayudará a pasar a la acción.

viernes, 14 de enero de 2011

El Arte del Cambio



Os quiero recomendaros un libro de psicoterapia que me han dejado y que me ha gustado mucho, se titula el Arte del Cambio, de Giorgio Nardone  y Paul Watzlawick.

EL ARTE DEL CAMBIO es un libro basado en el enfoque estratégico de la
psicoterapia, que se presenta en forma tanto teórica como práctica.
La obra pone de manifiesto la relevancia de como, en el intento de hallar la
solución de diversas situaciones problemáticas humanas, es importante, por parte de la
terapeuta, una síntesis personal entre la técnica sistemática, la inventiva y la elasticidad
mental. Porque en ocasiones, el terapeuta, para poder encontrar soluciones eficaces,
debe romper con sus esquemas y establecer una relación propia con el paciente
dejando de lado las soluciones ineficaces intentadas hasta el momento.

jueves, 13 de enero de 2011

Ultimas noticias

Esta mañana leyendo el periódico y viendo noticias me encontre con lo siguiente: http://www.abcdesevilla.es/20110113/sevilla/sevi-juez-rechaza-volver-internar-201101131156.html

La verdad que eso me trajo a la cabeza la canción de Andy y Lucas que la dirigieron a Marta del Castillo y que quiero compartir con vosotros...

lunes, 10 de enero de 2011

El elefante encadenado

Cuando yo era chico me encantaban los circos, y lo que más me gustaba de los circos eran los animales. También a mí como a otros, después me enteré, me llamaba la atención el elefante.
Durante la función, la enorme bestia hacía despliegue de su peso, tamaño y fuerza descomunal… pero después de su actuación y hasta un rato antes de volver al escenario, el elefante quedaba sujeto solamente por una cadena que aprisionaba una de sus patas a una pequeña estaca clavada en el suelo.
Sin embargo, la estaca era sólo un minúsculo pedazo de madera apenas enterrado unos centímetros en la tierra. Y aunque la cadena era gruesa y poderosa me parecía obvio que ese animal capaz de arrancar un árbol de cuajo con su propia fuerza, podría, con facilidad, arrancar la estaca y huir.
El misterio es evidente: ¿Qué lo mantiene entonces?. ¿Por qué no huye?
Cuando tenía cinco o seis años, yo todavía confiaba en la sabiduría de los grandes. Pregunté entonces a algún maestro, a algún padre, o a algún tío por el misterio del elefante. Alguno de ellos me explicó que el elefante no se escapa porque estaba amaestrado.
Hice entonces la pregunta obvia: “Si está amaestrado ¿por qué lo encadenan?”
No recuerdo haber recibido ninguna respuesta coherente.
Con el tiempo me olvidé del misterio del elefante y la estaca… y sólo lo recordaba cuando me encontraba con otros que también se habían hecho la misma pregunta.
Hace algunos años descubrí que por suerte para mí alguien había sido lo bastante sabio como para encontrar la respuesta:
El elefante del circo no escapa porque ha estado atado a una estaca parecida desde que era muy, muy pequeño.
Cerré los ojos y me imaginé al pequeño recién nacido sujeto a la estaca.
Estoy seguro de que en aquel momento el elefantito empujó, tiró y sudó tratando de soltarse. Y a pesar de todo su esfuerzo no pudo. La estaca era ciertamente muy fuerte para él.
Juraría que se durmió agotado y que al día siguiente volvió a probar, y también al otro y al que le seguía…
Hasta que un día, un terrible día para su historia, el animal aceptó su impotencia y se resignó a sus destino.
Este elefante enorme y poderoso, que vemos en el circo, no escapa porque cree –pobre– que NO PUEDE.
Él tiene registro y recuerdo de su impotencia, de aquella impotencia que sintió poco después de nacer.
Y lo peor es que jamás se ha vuelto a cuestionar seriamente ese registro.
Jamás… jamás… intentó poner a prueba su fuerza otra vez…
Vamos por el mundo atados a cientos de estacas que nos restan libertad… condicionados por el recuerdo de «no puedo»… Tu única manera de saber, es intentar de nuevo poniendo en el intento todo tu corazón…

sábado, 8 de enero de 2011

Funciones de la Socialización

El proceso de socialización cumple una serie de funciones que la sociedad estima necesarias para su vida y continuidad en el tiempo. Estas funciones responden y satisfacen a objetivos vitales de la sociedad. Las principales serían:

  • La transmisión de la cultura con su concepción del mundo, su valores y su conjunto simbólico. se trata de la aculturación o asimilación cultural en que los jóvenes reciben las costumbres e ideas de las generaciones precedentes
  • La compresión de la vida comunitaria con su marco fundamental y las reglas o papeles sociales que en ella rigen.
  • La enseñanza y legitimación de las normas y la consolidación de hábitos para obrar de acuerdo con ellas.
  • La adquisición de aptitudes y habilidades para la actividad y el trabjo que cumplirán su objetivo al llegar a la edad adulta.
  • La preparación del individuo para ejercer adecuadamente los roles que tendrá durante su existencia. la socialización, al confiarle responsabilidades crecientes en el conjunto, le enseña y anticipa en cierta medida el comportamiento maduro.
  • El desarrollo de la personalidad del socializado, haciéndole controlar y dirigir sus impulsos dentro de las pautas sociales. A la vez le ofrece modelos de identificación que le ayudarán a definir su personalidad.
  • La preparación profesional del mismo. Al socializarse asimila estímulos para trabajar y adquiere la prepación técnica para contribuir con eficiencia a la producción de bienes y servicios.
  • El hacerle partícipe del bien social creado por todos. El bien común de la sociedad consta de todos los elementos necesarios para la suficiencia de la vida. Estos bienes, de índole material y espiritual, son además esenciales para tener una existencia satisfactoria.

Estas serían las funciones de mayor relieve, en ellas se atiende sobre todo al punto de vista del individuo. Desde la perspectiva global de la sociedad se puede constatar que la socialización cumple en primer lugar una función homogeneizadora, pues induce en el socializado ideas, actitudes y pautas comunes en las que rigen para los demás miembros del conjunto. Esa homogeneización confiere a cada uno un conjunto organizado de ideas y conducta que no expresan su manera de ser particular, sino la manera recomendada por el grupo del que forma parte, es decir, le hacen adquirir su ser social.
La sociedad confia a la socializacion la tarea de seleccionar a los individuros que han de realizar tareas especializadas que ella necesita. esta función seleccionadora se inica en la diferenciación dentro del aula y culmina en la especialización profesional que clasifica y ordena a los individuos dentro del sistema laboral.
Las funciones sociales logran que el individuo asimile y cumpla las normas. Con esto se logra una adaptación y conformidad en la via colectiva. Esto impone limitaciones a la libertad individual, pues debe seguir un camino y no otro. Tales limitaciones quedan compensadas por los bienes económicos, culturales, morales y afectivos que ha creado la sociedad. Éstas también hacen que el individuo se adapte y sirva al interés común, pero él mismo debe también encontrar en la vida social la satisfacción suficiente de sus necesidades y aspiraciones. Esto será motivo para que cada uno respete las normas y cumpla adecuadamente sus roles. De lo contrario se generan situaciones de tensión e inestabilidad que perturbarán y prepararán el cambio social.

jueves, 6 de enero de 2011

Cuento


La Conferencia de Regalos de Navidad de aquel año estaba llena hasta la bandera. A ella habían acudido todos los jugueteros del mundo, y muchos otros que no eran jugueteros pero que últimamente solían asistir, y los que no podían faltar nunca, los repartidores: Santa Claus y los Tres Reyes Magos. Como todos los años, las discusiones tratarían sobre qué tipo de juguetes eran más educativos o divertidos, cosa que mantenía durante horas discutiendo a unos jugueteros con otros, y sobre el tamaño de los juguetes. Sí, sí, sobre el tamaño discutían siempre, porque los Reyes y Papá Noel se quejaban de que cada año hacían juguetes más grandes y les daba verdaderos problemas transportar todo aquello...
Pero algo ocurrió que hizo aquella conferencia distinta de las anteriores: se coló un niño. Nunca jamás había habido ningún niño durante aquellas reuniones, y para cuando quisieron darse cuenta, un niño estaba sentado justo al lado de los reyes magos, sin que nadie fuera capaz de decir cuánto tiempo llevaba allí, que seguro que era mucho. Y mientras Santa Claus discutía con un importante juguetero sobre el tamaño de una muñeca muy de moda, y éste le gritaba acaloradamente "¡gordinflón, que si estuvieras más delgado más cosas te cabrían en el trineo!", el niño se puso en pie y dijo:
- Está bien, no discutáis. Yo entregaré todo lo que no puedan llevar ni los Reyes ni papá Noel.
Los asistentes rieron a carcajadas durante un buen rato sin hacerle ningún caso. Mientras reían, el niño se levantó, dejó escapar una lagrimita y se fue de allí cabizbajo...
Aquella Navidad fue como casi todas, pero algo más fría. En la calle todo el mundo continuaba con sus vidas y no se oía hablar de todas las historias y cosas preciosas que ocurren en Navidad. Y cuando los niños recibieron sus regalos, apenas les hizo ilusión, y parecía que ya a nadie le importase aquella fiesta.
En la conferencia de regalos del año siguiente, todos estaban preocupados ante la creciente falta de ilusión con se afrontaba aquella Navidad. Nuevamente comenzaron las discusiones de siempre, hasta que de pronto apareció por la puerta el niño de quien tanto se habían reído el año anterior, triste y cabizbajo. Esta vez iba acompañado de su madre, una hermosa mujer. Al verla, los tres Reyes dieron un brinco: "¡María!", y corriendo fueron a abrazarla. Luego, la mujer se acercó al estrado, tomó la palabra y dijo:
- Todos los años, mi hijo celebraba su cumpleaños con una gran fiesta, la mayor del mundo, y lo llenaba todo con sus mejores regalos para grandes y pequeños. Ahora dice que no quiere celebrarlo, que a ninguno de ustedes en realidad le gusta su fiesta, que sólo quieren otras cosas... ¿se puede saber qué le han hecho?
La mayoría de los presentes empezaron a darse cuenta de la que habían liado. Entonces, un anciano juguetero, uno que nunca había hablado en aquellas reuniones, se acercó al niño, se puso de rodillas y dijo:
- Perdón, mi Dios; yo no quiero ningún otro regalo que no sean los tuyos. Aunque no lo sabía, tú siempre habías estado entregando aquello que no podían llevar ni los Reyes ni Santa Claus, ni nadie más: el amor, la paz, y la alegría. Y el año pasado los eché tanto de menos...perdóname.
Uno tras otro, todos fueron pidiendo perdón al niño, reconociendo que eran suyos los mejores regalos de la Navidad, esos que colman el corazón de las personas de buenos sentimientos, y hacen que cada Navidad el mundo sea un poquito mejor...

martes, 4 de enero de 2011

Educador/a Social

El educador social desarrolla su labor profesional en contextos muy diversos dando respuesta a las demandas de acceso a la cultura, al bienestar y de participación en la vida social de amplios colectivos de población.

Los educadores sociales se ocupan de aquellos campos de la educación que no tienen una regulación concreta, en ámbitos de intervención educativa con personas marginadas, con problemas sociales o de adaptación a su entorno.

Esta labor socioeducativa se aplica a grupos de edad diferentes (infancia, juventud, tercera edad...) y a sectores y problemáticas donde interviene la educación social (salud, justicia, servicios sociales, ocio).


La labor del educador social se puede llevar a cabo en ámbitos y contextos diferentes, por lo que el trabajo que realiza el educador puede variar mucho según el puesto que ocupa.

Algunos de los ámbitos de trabajo del educador social son la atención a la infancia y adolescencia en situación de riesgo social, la educación en centros de justicia para menores o prisiones, la elaboración de programas de educación en el ocio o de animación sociocultural, la formación y la inserción laboral de personas adultas o la animación y dinamización de residencias y equipamientos para personas de la tercera edad.

También pueden responsabilizarse de la gestión de equipamientos sociales y culturales o de la planificación de programas de intervención socioeducativa para la inserción de colectivos con necesidades específicas (mujeres, inmigrantes, personas con disminución, drogadictos, minorías étnicas...).

Las salidas profesionales del educador social se encuentran tanto en el sector público como privado y también en el denominado "sector social", es decir, asociaciones y entidades sin ánimo de lucro. Es habitual, también, que los educadores sociales trabajen de forma autónoma o a través de cooperativas de trabajadores.

Esta profesión, por su relación directa con la realidad social, exige un alto grado de dinamismo y capacidad de adaptación a los cambios ya que los ámbitos de trabajo evolucionan de acuerdo con las necesidades y las demandas sociales emergentes. En este sentido, el aumento de la esperanza de vida hace que se precisen más educadores especializados en personas mayores.

lunes, 3 de enero de 2011

Agentes de Socialización

Se consideran agentes de socialización a los responsables de la transmisión de los valores, aptitudes y modelos de comportamiento que constituyen la socialización. El individuo mantiene relaciones socializadoras a lo largo de mucho tiempo con un número incontable de personas, grupos o mecanismos sociales. Son tantos que resulta difícil enumerar los agentes que intervienen en el proceso de socialización, aunque atendiendo a diversos criterios nos podemos encontrar con los siguientes:


  • Agentes Formales, que explícitamente están dirigidos a socializar, como la escuela y Agentes Informales cuando ejercen esta función sin tenerla como objetivo, es decir, la cumplen de modo informal como la televisión.




  • Agentes Verticales, cuando actúan en sentido vertical, o sea de mayor a más joven, y Agentes Horizontales, cuando actúan desde el mismo nivel de edad o de clase social.




  • Agentes Homogéneos, cuando tienen las mismas características de edad o mentalidad y Agentes Hetereogéneos, cuando sus características internas son distintas.




  • Agentes Identificables, cuando muestran su imagen real con perfiles definidos, como la familia y Agentes Difusos cuando su identidad personal no es perceptible como la radio.




  • Los agentes que más estudiaron los sociólogos a lo largo de la historia son la familia y la escuela, aunque hoy en día también debemos considerar que es importante el papel socializador que hace el grupo de pares y los medios de comunicación.. Estos últimos los podemos desarrollar en otro momento porque nos pueden llevar más tiempo ya que no todos los sociólogos opinan de la misma forma y a lo largo de los años incluso se cambian las clasificaciones considerando unos agentes más influyentes que otros.

    Queda Prohibido

    Hace tiempo que había encontrado este texto y me gusta tanto que lo voy a compartir con vosotros...


                Queda prohibido llorar sin aprender, levantarte un día sin saber que hacer, tener miedo a tus recuerdos.
                Queda prohibido no sonreir a los problemas, no luchar por lo que quieres, abandonarlo todo por miedo, no convertir en realidad tus sueños.
                Queda prohibido no demostrar tu amor, hacer que alguien pague tus deudas y mal humor.
                Queda prohibido dejar a tus amigos, no intentar comprender lo que vivieron juntos, llamarles solo cuando los necesitas.
                Queda prohibido no ser tú ante la gentrecuerdene, fingir ante las personas que no te importan, hacerte el gracioso con tal de que te , olvida a la toda la gente que te quiere.
                Queda prohibido no hacer las cosas por ti mismo, tener miedo a la vida y a sus compromisos, no vivir cada día como si fuera un último suspiro.
                Queda prohibido echar a alguien de menos sin alegrarte, olvidar sus ojos, su risa, todo porque sus caminos han dejado de abrazarse, olvidar su pasado y pagarlo con su presente.
                Queda prohibido no intentar comprender a las personas, pensar que sus vidas valen mas que la tuya, no saber que cada uno tiene su camino y su dicha.
                Queda prohibido no crear tu historia, no tener un momento para la gente que te necesita, no comprender que lo que la vida te da, también te lo quita.
                Queda prohibido no buscar tu felicidad, no vivir tu vida con una actitud positiva, no pensar en que podemos ser mejores, no sentir que sin ti este mundo no sería igual.